“Estamos luchando por quedarnos en el campo”
“Para transformar un sueño en realidad, primero hay que tener un gran sueño”, fue el lema del Encuentro Provincial para jóvenes de toda la provincia entre 16 y 30 años, que viven en el medio rural y participan de un grupo/organización realizado en La Lola por la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación Delegación Santa Fe (SSAF).El lema esta tomado del Plan Estratégico Agroalimentario y Agroindustrial de la Nación posibilitando tambien la mirada de los jóvenes sobre la realidad desarrollando propuestas.
Claudio Tessini, delegado de la SSAF en la apertura del encuentro señaló “hoy el Estado abre estos espacios que son oportunidades para encontrarse, conocerse e intercambiar experiencias con otros jóvenes de otros lugares de la provincia para seguir creciendo, oportunidad que tal vez no tuvieron nuestros padres”.
Por su parte Verónica Radosevich referente del área de jóvenes de la SSAF explica “el encuentro tuvo como objetivo generar un espacio de encuentro entre los jóvenes que viven en el medio rural para el intercambio de experiencia, motivando la participación, fortaleciendo los procesos grupales”.
Quienes y para qué. Realizar un encuentro con jóvenes delegados de otros jóvenes y que sean parte de una organización, para conocer de sus realidades de jóvenes que viven en el medio rural, saber de sus demandas y propuestas y desde la SSAF delinear acciones de acompañamiento a jóvenes rurales.
Se vinieron. Participaron 50 jóvenes de diferentes lugares de la provincia: Intiyaco, Fortín Olmos, Colmena Guadalupe Norte, Campo Ubajó, Las Palmas, San Javier, Tostado, Villa Minetti, Helvecia, Cayastá, Arroyo Leyes y Soldini.
Tessini reconoció “Es un desafío atender la demanda generada por este sector que es una edad que para algunas cosas son chicos y para otras son grandes. Con realidades diferentes según el territorio. Y a la vez es interesante saber del valor heredado de sus familias y de la fuerza para seguir en el campo. Los jóvenes hacen propuestas y para el estado es una oportunidad contar con esta calidad de juventud”.
Los jóvenes dicen
Queremos estudiar. Un gran porcentaje de los jóvenes planteó las dificultades que tienen para seguir estudiando. Frases que describen realidades:
“En Arroyo Leyes no tenemos secundaria en el campo y si queremos seguir estudiando nos tomamos un colectivo a Rincón todos los días si tenemos plata”.
“En San Javier en la escuela no tenemos dibujo ni música”.
“En Helvecia no conseguimos banco en las escuelas porque primero anotan a los chicos de afuera”.
“Es costoso salir a estudiar afuera, por cuestiones económicas no podemos salir a estudiar, los sueldos de los puesteros son muy bajos y no nos alcanza, se trabaja en negro”.
También reclaman que la escuela secundaria” hoy no tiene conexión con la universidad”.
Economía y Producción.
Los jóvenes integrantes activos de las familias agricultoras quieren ser parte del Desarrollo Rural ya que se consideran un eslabón partícipe del sustento diario de la chacra familiar. Manifiestan las diferentes situaciones de conflicto ante la avanzada del modelo agroexportador.
Los jóvenes del Departamento 9 de Julio expresan “No nos gusta que nos invadan. Hay gente de otros países que están comprando tierras. Otras familias alquilan las tierras y se van, hay tanta presión por parte del pool de siembra y al ser productores chicos tenés que vender la producción porque hay toda una presión”. Relatan las adversidades del departamento en cuanto al clima “Por la sequía se perdió mucha hacienda, estamos peleando para seguir en el campo. No podemos sembrar porque no te fían nada, la mitad del campo esta alquilada y la otra tenemos alfalfa. Están quedando medianos y grandes productores con los campos, los más chicos nos estamos yendo”. Finalizan la exposición con esa esperanza de campesinos que los caracteriza “Tenemos expectativas, la escuela Agro técnica de Villa Minetti va a habilitar el frigorífico de ganado menor y es una oportunidad para la cría de cerdos, chivos…”.
En tanto los jóvenes de Arroyo Leyes cuentan que una de las dificultades en la zona de la costa es “la falta de defensa sobre el oeste (bañado) ya que las crecidas del río afectan las cosechas, esto sucede cada cuatro o cinco años”.
Algunos jóvenes con ansias de comenzar a desarrollar una actividad productiva que con el tiempo les permita independizarse y armar una familia solicitan “nos respalden para obtener créditos, nosotros queremos trabajar pero que no nos regalen nada. Que la garantía sea el capital que tiene (con relación a lo productivo) ·”
Otros piden “Que haya políticas de Estado para favorecer y valorizar con estrategias de promoción agregando valor a lo que producimos. Hoy existen muchos requisitos para la comercialización de los productos de los pequeños productores aumentando los costos y no podemos adaptarnos a esas normas. Y si logramos vender generalmente lo hacemos a precios más bajos”.
“Queremos ser parte de la Mesa de organizaciones de la Agricultura familiar porque son espacios para seguir formándonos y aprender” fue uno de los pedidos que realizaron el grupo de jóvenes de Sana Javier hijos de productores activos en la Mesa De organizaciones.
Les preocupa. El encuentro dio lugar también para que expresen qué les preocupa de cada lugar. Algunos de los temas que se plantearon:
“En San Javier la falta de conciencia acerca de la trata de personas”.
“La discriminación por ser aborigen, por falta de estudio”
“No tenemos espacios para divertirnos en el campo. Falta algo de diversión en el lugar, los chicos se van a otros pueblos a divertirse o al boliche”.
“Escasas fuentes de trabajo. Comenzamos a trabajar en changas a los 15 años y dejamos la escuela”.
“En Tostado vemos cómo el avance tecnológico: quitó la mano de obra”.
“Se están produciendo desalojos de productores que están hace 30 o 40 años viviendo en el lugar, y se van a vivir al pueblo o a las ciudades. Creemos que esos desalojos son porque no conocemos nuestros derechos”.
“Los están expulsando de la tierra, hay gente de San Bernardo y los algodonales, hay muchos hijos de los productores que quieren quedar ahí, son jóvenes que quieren seguir viviendo y trabajando ahí”.
“En Las Palmas falta un centro de salud tenemos que viajar hasta Romang o Reconquista por atención médica. No hay plaza ni comuna, pertenecemos a la Comuna de los Laureles. Tampoco hay medio de transporte público para viajar.
“Es difícil conseguir vivienda rural, tampoco hay planes de viviendas rurales”.
“No hay elementos: tierra, capacitación, herramientas”.
“No se consigue trabajo porque la mayoría no tenemos estudio”.
“No hay planes de viviendas para la zona bien rural. Hay que irse a la ciudad para conseguir una casa”.
“Hay veces que nos marginan en el mismo pueblo”.
Proponen.
Por último y luego de dos jornadas de trabajo intenso los jóvenes realizaron propuestas que la resumieron en éstas “queremos políticas de Estado con requisitos acorde a los jóvenes, diferenciada y acordes a los territorios según las características socioeconómicas.” Por su parte se comprometieron a continuar organizando grupos para trabajar a partir de sus sueños y necesidades. Valoran el acompañamiento en éste caso de la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación. Agradecimiento que se traduce en responsabilidad para ésta Institución.
Antes del encuentro...
Verónica reconoce que las herramientas con las que cuentan para la intervención con los jóvenes son muy importantes pero que no alcanzan. “Porque es necesario contar con múltiples herramientas ya que cuando hablamos de jóvenes rurales, es un amplio rango que esconde etapas y situaciones bien distintas. Y por ello surge como propuesta hace ya algún tiempo ir acompañándolos en el proceso de formación de grupos u organizaciones, y desde nuestro rol es posibilitar articulaciones, gestiones con otras instituciones a nivel local, provincial y nacional”.
Acompañar para que se organicen para llevar adelante propuestas que mejoren su realidad de jóvenes en el medio rural es una de las acciones de la Subsecretaría. “hoy tenemos jóvenes sin posibilidades de estudio, de capacitación, de financiamiento, de gestión, de trabajo, de tierra, de viviendas. Modificar esas realidades no solo corresponde a los jóvenes sino a todo el sector de familias agricultoras: desde las bases incidir en las políticas públicas con propuestas del y para el sector participando en las organizaciones de la zona”.
“Éste encuentro de jóvenes es parte del trabajo con el sector, -señala Verónica Radosevich- de generar espacios para que los jóvenes intercambien experiencias, reflexionen juntos. Además trabajamos sobre los sueños que tienen y vemos que hay cómo dos realidades que se hicieron presentes durante el encuentro. Por un lado los jóvenes que viven en el campo, que sus familias viven de lo que producen. Y otra realidad: jóvenes que viven en el medio rural, en pueblos rurales que son hijos de empleados públicos, hijos de peones, aborígenes....”. Los sueños están marcados por ésas dos realidades, Los hijos de productores, que viven en el campo o tienen acceso a la tierra, proyectan su vida ahí pero necesitan apoyo para emprender su proyecto productivo, piden capacitaciones que estén ligadas a la producción y que les permita generar una nueva actividad o mejorar la que ya hacen, con rentabilidad para poder vivir de lo que producen y así seguir viviendo en el campo, trabajando la tierra.
Otros jóvenes que viven el medio rural sueñan con poder estudiar, “seguir alguna carrera que les permita “ser alguien”. Llama la atención –dice Verónica- que para muchos de estos jóvenes ser alguien, solo es posible estudiando. Aprovechamos ese momento para reflexionar sobre ser alguien. Es necesario reflexionar sobre estos temas porque si no somos nadie no tenemos derechos, y todo ser humano es sujeto de derecho no solo aquellos que estudian”. Los jóvenes relataron cómo fueron y son sujetos de discriminación por vivir en el campo y más aun si pertenecen a comunidades originarias. Desconociendo y desvalorizando todos sus saberes, el trabajo con la tierra, el trabajo de las familias en la chacra produciendo alimentos.
Los jóvenes en el encuentro compartieron con otros jóvenes que viven en diferentes lugares de la provincia de Santa fe, con otras realidades y que algunos de ellos expresaron que eso fue una de las cosas que más les impactó, lo que se llevan del encuentro.
Por último Verónica reconoce “el desafió como Subsecretaría es poder acompañar los procesos que se están iniciando en los jóvenes pero también es recrear herramientas de intervención, porque los jóvenes que viven en el medio rural viven las desigualdades de oportunidades que tienen en lo estructural, lo recreativo, en lo educativas, económicas, tecnológicas. Y lo que me queda de éste encuentro es que los jóvenes demandan, necesitan que los adultos los acompañemos en éstos procesos participativos para encontrar un lugar dentro de sus comunidades. Es aquí donde aparece el trabajo de los técnicos y técnicas de la subsecretaría para trabajar con jóvenes”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario